Apoyar iniciativas de innovación que vinculen sectores como biotecnología, digitalización y economía circular.
Promover acuerdos de cooperación entre países latinoamericanos en áreas clave como educación, salud, energías renovables y desarrollo tecnológico.
Crear plataformas de diálogo político entre gobiernos, organismos internacionales y sectores privados.
Invertir en la formación de líderes políticos y técnicos para gestionar proyectos de cooperación de manera más efectiva.
Diseñar mecanismos transparentes para medir el impacto de los proyectos.