Aparte de las opciones señaladas previamente, también se debería considerar el practicar la ganadería sostenible, la cual promueve la salud del suelo, la biodiversidad y la eficiencia en el uso de recursos como el agua, las pasturas, entre otros. Otro es el uso de variedades locales, las cuales promueven la diversificación de cultivos y tienen el beneficio de contar con la adaptación a condiciones climáticas locales.