Las plantas medicinales son fundamentales para la etnobotánica, ya que es la conexión entre la naturaleza, la salud y los saberes ancestrales de los pueblos indígenas. En la Chakra Amazónica, las comunidades han preservado y transmitido el conocimiento sobre el uso de estas plantas para tratar enfermedades, fortalecer el cuerpo y armonizar el equilibrio con el entorno. Por otro lado, el valor agregado de estás especies se enfocan en el potencial medicinal, pero también en el aporte a la biodiversidad, la seguridad alimentaria y la economía local. Asimismo, dar importancia a estos conocimientos revalorizandolos, impulsando políticas de conservación y el desarrollo de productos naturales con reconocimiento cultural y comercial, beneficiando a las comunidades y a la sostenibilidad ambiental.
