El turismo sostenible en la Amazonía no debería centrarse solo en captar visitantes. Lo realmente esencial es que se transforme en un ámbito para rescatar, reconocer y difundir los conocimientos ancestrales que forman parte de nuestra identidad colectiva. Si se ignora este componente cultural y espiritual, el turismo se convierte en una mera actividad comercial, perdiendo aquello que realmente necesita ser protegido: la memoria viva de nuestras comunidades y esa conexión íntima que tenemos con el ambiente natural que nos cobija y sostiene